Digitalización de procesos de mediación, arbitraje, negociación y conciliación (MASC)

Una vez el mediador o institución mediadora, árbitro, tribunal o corte de arbitraje, organismo de conciliación o, en general, el profesional u organismo que va a mediar entre las partes, recibe la solicitud para realizar el proceso de resolución de un conflicto, contacta con las partes y acuerdan realizarlo, da de alta el mismo en nuestra aplicación.

Introduce los datos de las personas físicas o jurídicas en conflicto y de sus posibles representantes y remite una primera convocatoria de reunión por videoconferencia, con un orden del día definido o a definir en la misma. Si es necesario, incluye como parte de ese proceso los documentos que deban compartirse y/o da de alta carpetas privadas para la aportación de documentos en el portal privado de documentación que se crea para las partes al dar de alta la primera convocatoria de reunión.

Las partes en conflicto reciben la convocatoria y un acceso a un portal privado de intercambio de documentación y comunicación con el organismo mediador convocante, en el que todo mensaje o documento queda trazado y no es manipulable.

En ese portal, en el que hay que identificarse mediante el método que se parametrice de entre los existentes (número de identificación aportado, contraseña de uso único, biometría, certificado digital) puede aportar documentos, descargar y leer los aportados por organismo mediador o la otra parte en conflicto, y comunicarse con el mediador.

Llegado el momento de la reunión, las partes y/o sus potenciales representantes se conectan en una videoconferencia segura y de acceso protegido, que es administrada y gestionada por el organismo mediador, quien dirige la reunión y propone acuerdos, recogiendo en el acta lo necesario, de igual forma que se haría en una reunión presencial.

En la reunión se pueden consultar documentos simultáneamente por todas las partes y, si se llega a acuerdo, firmar digitalmente el documento generado con los acuerdos finales. Esta firma tiene plena validez y no es imprescindible que las partes dispongan de certificado digital.

Si no se llega a un acuerdo y se decide mantener una nueva reunión, es posible agendarla por el organismo mediador antes de que la que está en curso finalice, consensuando en el momento la fecha y hora de la convocatoria, así como el alcance de ésta.

Mantenidas las reuniones que hayan sido necesarias, al finalizar el proceso, con o sin acuerdo, las partes y el mediador tendrán acceso en el portal privado a toda la documentación intercambiada y/o firmada, incluyendo actas de las reuniones.

Todo lo hablado en las reuniones y lo intercambiado digitalmente queda almacenado en forma de evidencias electrónicas encriptadas, no manipulables, en Blockchain.